SÍNDROME DE DEFICIT ATENCIONAL En un artículo aparecido en forma electrónica Eur Child Adolesc Psychiatry. 2006 May 13; se ha reportado que el extracto de corteza de pino marítimo francés, PYCNOGENOL, induce mejorías significativas en el desórden de déficit atencional en niños.
El estudio fue desarrollado en el Hospital Universitario de niños en la Universidad de Comenius , Eslovaquia.
Pycnogenol es un fitofármaco que contiene ácidos fenólicos, catequinas, taxifolina y procianidinas. El estudio se hizo contra placebo, a los niños se les aplicaron, al inicio y luego de 1 mes de tratamiento, los siguientes Tests: CAP (Child Attention Problems) teacher rating scale, Conner's Teacher Rating Scale (CTRS), Conner's Parent Rating Scale (CPRS) y Wechsler Intelligence Scale para niños, modificada.
El tratamiento causó una significativa reducción de la hiperactividad, mejoró la atención, la coordinación visual motora y la concentración en los niños.
INSUFICIENCIA VENOSA CRÓNICA
En otro estudio publicado en Clin Appl Thromb Hemost. 2006 Apr;12(2):205-12., se comparó la eficacia de PYCNOGENOL con el de DAFLÓN, resultando mejor el tratamiento con PYCNOGENOL.
PYCNOGENOL fue clínicamente más efectivo en el tratamiento de la insuficiencia venosa crónica y la microangiopatía venosa que el Daflón. La IVC de los 86 pacientes tratados era de tipo severa.
Tratamiento: Picnogenol oral o Daflón durante 8 semanas. Los efectos del PYCNOGENOL ya eran evidentes a las 4 semanas, no así en los tratados con Daflon.
miércoles, junio 21, 2006
martes, junio 20, 2006
AVANCE DEL CURSO DE FITOMEDICAMENTOS
Hemos tenido este Martes 20 de Junio otra presentación del Profesor Sandro Bustamante, quien nos ha hablado acerca de los aspectos básicos y clínicos de fitomedicamentos utilizados con éxito para el tratamiento de la insuficiencia venosa crónica, várices y hemorroides.
Pudimos constatar la abundante literatura que existe referente a Aesculus hipocastanum, Castaño de indias, y profundizamos en el conocimientos de aspectos farmacodinámicos y farmacocinéticos. Pudimos comprender las sutiles diferencias farmacodinámicas que hay entre los mecanismos de acción de Aesculus y Ruscus acculeatus, otro fitofármaco empleado con éxito en estas patologías.
En la segunda parte de esta mañana hemos tenido ocasión de ver además un seminario presentado por dos de las asistentes al curso, las Doctoras Claudia Alarcón y Virginia Tajmuch, ambas Médico Cirujanos, quienes nos han hablado acerca del uso de Ginkgo biloba en el tratamiento de la pancreatitis aguda. La presentación fue muy interesante, clara y precisa, resultó motivante ver el entusiasmo y la dedicación que pusieron en la preparación del tema. Tal como en los seminarios anteriores, en esta ocasión una vez más se comprobaron las amplias posibilidades que muestra la Fitoterapia racional y lo importante que resulta la aproximación a esta área del conocimiento, siempre considerando que nuestro objetivo es promover una medicina basada en la evidencia.
Hemos llegado al tercio final del curso y en las próximas clases abordaremos otrso temas tanto o más interesantes que los que ya hemos revisado. Los seminarios pendientes que desarrollarán los asistentes al curso nos deparan sorpresas que estimularán la búsqueda de mas conocimiento. Los invitamos para renovar el entusiasmo y el compromiso en esta etapa final.
Pudimos constatar la abundante literatura que existe referente a Aesculus hipocastanum, Castaño de indias, y profundizamos en el conocimientos de aspectos farmacodinámicos y farmacocinéticos. Pudimos comprender las sutiles diferencias farmacodinámicas que hay entre los mecanismos de acción de Aesculus y Ruscus acculeatus, otro fitofármaco empleado con éxito en estas patologías.
En la segunda parte de esta mañana hemos tenido ocasión de ver además un seminario presentado por dos de las asistentes al curso, las Doctoras Claudia Alarcón y Virginia Tajmuch, ambas Médico Cirujanos, quienes nos han hablado acerca del uso de Ginkgo biloba en el tratamiento de la pancreatitis aguda. La presentación fue muy interesante, clara y precisa, resultó motivante ver el entusiasmo y la dedicación que pusieron en la preparación del tema. Tal como en los seminarios anteriores, en esta ocasión una vez más se comprobaron las amplias posibilidades que muestra la Fitoterapia racional y lo importante que resulta la aproximación a esta área del conocimiento, siempre considerando que nuestro objetivo es promover una medicina basada en la evidencia.
Hemos llegado al tercio final del curso y en las próximas clases abordaremos otrso temas tanto o más interesantes que los que ya hemos revisado. Los seminarios pendientes que desarrollarán los asistentes al curso nos deparan sorpresas que estimularán la búsqueda de mas conocimiento. Los invitamos para renovar el entusiasmo y el compromiso en esta etapa final.
sábado, junio 17, 2006
FITOMEDICAMENTOS Y HOMEOPÁTICOS: VERTIENTES DISTINTAS EN BÚSQUEDA DE UN FIN COMUN
Decidí incluír en el BLOG esta respuesta a una consulta por mail para promover una discusión general de los asistentes al curso de Fitofármacos y fitomedicamentos.
En esencia, considero que en una lista de medicamentos de origen natural se debe diferenciar lo que es homeopático de lo que son fitofármacos.
No se debe olvidar que la homeopatía no se rige por los paradigmas de la farmacología moderna.
Los homeópatas piensan que es posible reducir una sustancia a su estado molecular y aislar una molécula; esta molécula tiene una movilidad automática e incesante, conocido el movimiento como movimiento Browniano. Cada átomo y molécula posee una gran energía las partículas contenidas en los átomos se mueven a velocidades altísimas. Conocemos que la fusión o fisión de átomos libera una enorme cantidad de energía. De estas observaciones se deduce: Que en las sustancias materiales aparentemente sólidas, yacen dormidas grandes cantidades de energía. Las repetidas diluciones y sucusiones de un medicamento homeopático liberan Una gran energía curativa inherente a la sustancia original.
Aqui no hay una relación dosis -respuesta como se plantea en la farmacología moderna.
A continuación se ilustra el efecto relajador de Acetilcolina sobre aorta de rata que ha sido sometida in vitro a una concentración elevada de glucosa (Grupo B) y se les compara con vasos que no fueron sometidos al mismo tratamiento (controles, Grupo A). Esta respuesta de relajación del músculo liso vascular (MLV) es mediada por el óxido nítrico liberado por el endotelio vascular. La glucosa desencadena estrés oxidativo que altera la función del endotelio.
Como se puede ver, el endotelio relaja al MLV a medida que aumentamos la concentración de Acetilcolina, y cuando el endotelio está en malas condiciones, relajará menos al MLV.
Esto es un aspecto central a la farmacología, el efecto de los fármacos es dependiente de la dosis o de la concentración.
La Homeopatía por el contrario, plantea que a mayor dilución de un principio activo es cuando se observará su efecto terapéutico.
Hahnemann quería probar algunos de los medicamentos más utilizados en aquella época- como el mercurio y el arsénico- pero naturalmente no podía dar esas sustancias tóxicas a individuos sanos; entonces diluyó en una décima parte la cantidad habitual; el paciente seguía curándose pero la agravación de los síntomas persistían. Hahnemann entonces volvió a diluir en una décima parte más hasta que finalmente obtuvo una dilución que era completamente ineficaz por que ya no quedaba en ella medicamento alguno. Las ventajas de la simple dilución eran claramente limitadas. Si su medicamento no era lo bastante fuerte para agravar los síntomas, era demasiado floja para curar. El futuro de la homeopatía parecía entonces peligrar. Hahnemann sometió a cada dilución a una serie de vigorosas sacudidas denominadas sucusiones y descubrió que las diluciones progresivas no sólo eran menos tóxicas, sino también más potentes.
La Homeopatía es sin duda una vertiente diferente a la terapéutica basada en la farmacología, aunque muy interesante desde luego.
M. A. Morales S.
En esencia, considero que en una lista de medicamentos de origen natural se debe diferenciar lo que es homeopático de lo que son fitofármacos.
No se debe olvidar que la homeopatía no se rige por los paradigmas de la farmacología moderna.
Los homeópatas piensan que es posible reducir una sustancia a su estado molecular y aislar una molécula; esta molécula tiene una movilidad automática e incesante, conocido el movimiento como movimiento Browniano. Cada átomo y molécula posee una gran energía las partículas contenidas en los átomos se mueven a velocidades altísimas. Conocemos que la fusión o fisión de átomos libera una enorme cantidad de energía. De estas observaciones se deduce: Que en las sustancias materiales aparentemente sólidas, yacen dormidas grandes cantidades de energía. Las repetidas diluciones y sucusiones de un medicamento homeopático liberan Una gran energía curativa inherente a la sustancia original.
Aqui no hay una relación dosis -respuesta como se plantea en la farmacología moderna.
A continuación se ilustra el efecto relajador de Acetilcolina sobre aorta de rata que ha sido sometida in vitro a una concentración elevada de glucosa (Grupo B) y se les compara con vasos que no fueron sometidos al mismo tratamiento (controles, Grupo A). Esta respuesta de relajación del músculo liso vascular (MLV) es mediada por el óxido nítrico liberado por el endotelio vascular. La glucosa desencadena estrés oxidativo que altera la función del endotelio.
Como se puede ver, el endotelio relaja al MLV a medida que aumentamos la concentración de Acetilcolina, y cuando el endotelio está en malas condiciones, relajará menos al MLV.
Esto es un aspecto central a la farmacología, el efecto de los fármacos es dependiente de la dosis o de la concentración.
La Homeopatía por el contrario, plantea que a mayor dilución de un principio activo es cuando se observará su efecto terapéutico.
S. HAHNEMANN
Hahnemann quería probar algunos de los medicamentos más utilizados en aquella época- como el mercurio y el arsénico- pero naturalmente no podía dar esas sustancias tóxicas a individuos sanos; entonces diluyó en una décima parte la cantidad habitual; el paciente seguía curándose pero la agravación de los síntomas persistían. Hahnemann entonces volvió a diluir en una décima parte más hasta que finalmente obtuvo una dilución que era completamente ineficaz por que ya no quedaba en ella medicamento alguno. Las ventajas de la simple dilución eran claramente limitadas. Si su medicamento no era lo bastante fuerte para agravar los síntomas, era demasiado floja para curar. El futuro de la homeopatía parecía entonces peligrar. Hahnemann sometió a cada dilución a una serie de vigorosas sacudidas denominadas sucusiones y descubrió que las diluciones progresivas no sólo eran menos tóxicas, sino también más potentes.
La Homeopatía es sin duda una vertiente diferente a la terapéutica basada en la farmacología, aunque muy interesante desde luego.
M. A. Morales S.
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